Información acerca del Amaranto
El amaranto es un grupo de más de 60 especies diferentes de granos que se cultivan desde hace muchos años. Estos granos se consideraban antaño un alimento básico en las civilizaciones inca, maya y azteca.
El amaranto está clasificado como pseudocereal, lo que significa que técnicamente no es un grano de cereal como el trigo o la avena, pero comparte un conjunto comparable de nutrientes y se utiliza de forma similar. Su sabor terroso y a nuez se adapta bien a una gran variedad de platos.
Razones para incluir el amaranto en tu dieta
Además de ser increíblemente versátil, este nutritivo grano no contiene gluten y además contiene muchos otros beneficios:
-Es rico en fibra y proteínas, así como en muchos micronutrientes importantes.
-Es una buena fuente de manganeso, magnesio, fósforo y hierro.
-Es rico en antioxidantes, como el como el ácido gálico, el ácido p-hidroxibenzoico y el ácido vanílico que son compuestos naturales que ayudan a proteger el organismo contra los radicales libres dañinos.
¿Comer amaranto ayuda a perder grasa?
El amaranto tiene un alto contenido en proteínas y fibra, que pueden ayudar a perder grasa dentro en tu plan de alimentación, debido a que que ayuda a la reducción del apetito y la ingesta calórica. Además, la fibra del amaranto puede desplazarse lentamente por el tracto gastrointestinal sin ser digerida, lo que ayuda a promover la sensación de saciedad.
Para maximizar la pérdida de grasa, asegúrate de combinar el amaranto con una dieta saludable y un estilo de vida activo.
¿Cómo integrar el amaranto en tu dieta?
El amaranto es fácil de preparar y se puede utilizar en muchos platos diferentes.
Antes de cocinarlo, puede germinarlo sumergiéndolo en agua y dejándolo germinar de uno a tres días. El germinado facilita la digestión de los granos y descompone los antinutrientes, que pueden dificultar la absorción de minerales.
Para cocer el amaranto, combina agua con amaranto en una proporción de 3:1. Caliéntalo hasta que llegue a ebullición, luego reduce el fuego y déjalo cocer a fuego lento durante unos 20 minutos, hasta que se absorba el agua.
He aquí algunas formas sencillas de disfrutar de este nutritivo grano:
-Añade amaranto a los batidos para aumentar el contenido de fibra y proteínas.
-Utilízalo en platos en lugar de pasta o arroz.
-Mézclalo en sopas o guisos para añadir espesor.
-Conviértelo en un cereal para el desayuno añadiendo fruta, frutos secos o canela.